Aquel cielo nativo

Por Ramiro Milenio

22 agosto 2006

Narrativa. Logos

Sopla el viento y fluye de aquí a allá y una banda de mariposas se deja llevar y fingir. Llueve sobre la tierra que se empapa, después escampa y las alúas revolotean en busca del rayo de sol fugitivo que nos irradia. Hay un tiempo de vivencias trazadas en la genealogía que nos adorna y compara
Obra de Juan Genovés


Así como el árbol a la vera del camino
con su fruta al que camina se acierta.

Así como la fuente bermeja se mana
paladar de las huertas y sus privanzas
de hortalizas y frutos que se explayan
en las mesas y prenden ahíta ofrenda.

Así como el sol sin reserva se entrega
colmando al día de sus dones y a los
cielos de un azul limpio y claro en el
que los pájaros libres y golosos vuelan.

Así como el rayo se enraya y tralla y truena
el trueno del puro gozo en sus requiebros
y mudanzas a lluvia. Así: Así me quiero y
en ti, página generosa, a ser vuelvo: Vengo.

en Con voz propia